Esa marca que usas ¿es trigo limpio?
El feminismo es uno de los tópicos más populares en las reuniones con amigos, aulas, tertulias televisivas y ahora parece que llegó a las estanterías de moda para quedarse.
Nosotros pensamos que no hay problema en que una marca exprese a través de sus productos su filosofía, pero ¿Qué pasa cuando una marca que solo quiere beneficios se aprovecha de la ola feminista para ganar dinero? ¿Qué pasa cuando sus formas de hacer las cosas son completamente dispares al movimiento feminista?
Allí es donde nos parece está todo mal.
Hay muchas cosas que se deben considerar, no solo cuando compras ropa, también cuando compras alimentos, cosas para tu casa o consumes en general.
Te contaremos algunos casos.
En verano el CEO de Feminist Apparel, Alan Martofel vivió un episodio en donde la marca favorita de muchas feministas quedó expuesta.
En junio una asociación que lucha en contra de las violaciones denunció que Martofel había publicado en 2013 un texto que decía: “He acercado mi paquete por detrás a mujeres en autobuses y conciertos sin su consentimiento. Me he enrollado con la tía borracha de la fiesta porque era la fácil. He cogido la mano de una mujer mientras dormía y la he puesto en mis parte intimas”.
Ya imaginaran como se sintieron las colaboradoras de la marca, empleadas y público en general con esta noticia.
Feminist Apparel no ha sido la única marca que se ha visto envuelta en escándalos de esa índole, la propia Sophia Amoruso, adorada por muchas por su #GirlBoss, se vió envuelta en un escándalo cuando una gran empresa compró la marca Nasty Gal y se destaparon prácticas nada feministas durante su gestión, como por ejemplo despidos a embarazadas. Así que hay que tener mucho cuidado con aquellas marcas de moda que se autoproclaman feministas.
Las grandes empresas no se quedan atrás, pero si hablamos de los grandes grupos de moda, necesitaríamos una revista entera para contar las despreciables condiciones en que trabajan empleados en los países más desfavorecidos para poder hacer frente a la demanda de una industria que hace ropa cada vez más desechable.
Puedes saber más sobre la industria de la moda en el informe de Greenpeace titulado “Timeout for fast fashion”.
Puedes ver el informe haciendo click aquí
¿Qué pretendemos contando esto? Hacerte ver que hay muchas marcas, de las cuales no sabemos ni la tercera parte y que aprovechan cada ocasión para vender y obtener grandes beneficios.
No solo es feminismo
Pero ¿Qué debes considerar de una marca?
No solo debes considerar si una marca que parece feminista ofrece productos que vayan acorde con su filosofía y forma de trabajar. También tienes que investigar un poco quienes están detrás de la marca, cómo producen, si son ecofriendly o si sus materiales son de primera calidad.
Puede parecer agotador, pero verás que una vez lo haces, te sentirás mejor contigo misma.
Tenemos que comenzar a ver a quién le dejamos nuestro dinero y ya que hay tantas opciones en el mercado, debemos aprender a elegir.
Un consumo más responsable es posible y eres parte del cambio.
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