El episodio final de la serie «Reina Carlota, una historia de Bridgerton» nos dejó una escena de amor memorable, intensa e improbable. Todo ser humano con acceso a las redes sociales la ha visto ya, pues se volvió tan viral como era de esperar, pero tomémonos un momento para recordarla.
En la residencia real, el rey Jorge insiste en rechazar a Carlota, pero ésta no se irá sin la respuesta a su única pregunta: ¿me amas? Jorge balbucea, replica que estar con él es peligroso, que no es merecedor de amor. Pero nadie deja a Carlota sin una respuesta. Lo sabemos porque la conocimos ya adulta, reinando enérgica en la Inglaterra de la regencia que vivimos a través de Los Bridgerton, serie de la que “…una historia de Bridgerton” es precuela.
Decimos que fue una escena memorable e intensa porque Carlota, inquebrantable, expresa su amor incondicional por Jorge y él confiesa que dicho amor es recíproco con una de las frases más usadas y, sin embargo, todavía más apasionadas de las historias de amor: “no puedo respirar cuando no te tengo cerca, mi corazón dice tu nombre”. Todas morimos de amor. Y decimos que es improbable porque una aristocracia multiétnica en la Inglaterra de la regencia era, cuando menos, impensable.
Recordemos que la serie Los Bridgerton está basada en una saga de ocho novelas románticas, escritas por Julia Quinn, que cuentan las peripecias amorosas de los retoños de una noble y ficticia familia londinense durante la Regencia. La Reina Carlota es un spin-off de dicha serie. No está basada en un libro, el guión es fruto de la imaginación de Shonda Rhimes y un poco de ayuda de la historia de un personaje real.
La reina Carlota y el rey Jorge existieron
Sofía Carlota, hija de un duque y una princesa, nació en el ducado alemán de Mecklenburg-Strelitz en 1744. Se convirtió en reina de Gran Bretaña e Irlanda al casarse con Jorge III en Londres, en septiembre de 1761. Tuvieron 15 hijos.
Jorge III sufrió una enfermedad mental
Aunque mucho antes había dado muestras de inestabilidad, fue en 1788 cuando el Jorge III experimentó el primero de una serie de episodios maníacos que terminaron por apartarlo de sus deberes reales y de la reina. Pasó a la posteridad como el “rey loco”.
Carlota nunca fue oficialmente la monarca regente
Carlota fue legalmente la guardiana de toda su familia -incluyendo el rey- hasta 1811, cuando el desorden maníaco de Jorge forzó la designación de su primogénito, también Jorge, el Príncipe de Gales, como regente.
Este artículo ha sido escrito por Elev8Lifestyle
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