El sexismo está muy presente todavía en nuestra sociedad, no solo en la publicidad o redes sociales, también en nuestro espacio de trabajo e inclusive en nuestro entorno familiar.
Identificar el sexismo nos ayuda a combatirlo y a reeducar a nuestro entorno.
Por eso te hablaremos un poco más sobre el sexismo, todavía tan latente en nuestra sociedad.
Primero ¿Qué es el sexismo?
El sexismo es tener la idea de que los hombres son superiores a las mujeres. Esta superioridad puede ser física o intelectual. Se piensa que la mujer existe para gustar, encargarse y complacer a los hombres. El sexismo se pone de manifiesto mediante el lenguaje, símbolos y costumbres históricamente arraigadas.
¿Qué es el androcentrismo?
El androcentrismo es la visión de que el hombre es el centro del mundo y su mirada la única posible, generalizar a la sociedad en hombres, para referirse a todos (hombres y mujeres) y pensar que los hombres son el centro del universo.
El sexismo, muy arraigado en nuestra sociedad.
La desigualdad laboral es un buen ejemplo de que es el sexismo. Todavía en muchos lugares del mundo las mujeres no son valoradas, ni ganan igual que los hombres. Simplemente por el hecho de que se cree que no son aptas o capaces de hacer ciertas labores por ser mujeres.
Otra situación donde vemos muy claro el problema del sexismo es en el entorno familiar. Las mujeres son las que se encargan de la cena, de limpiar o de cuidar a los niños ¿el motivo? porque todavía se considera que muchas mujeres existen solo para complacer a los hombres en lo que necesiten.
El sexismo existe también en el lenguaje
En el lenguaje también está presente y mucho más de lo que creemos. Palabras que significan lo mismo tienen connotaciones muy distintas si son femeninas o masculinas.
Por ejemplo si un hombre es llamado «perro» puede llegar a ser hasta una especie de halago por parte de sus compañeros, en cambio decir a una mujer «perra» siempre tendrá una connotación negativa.
Como el machismo, podríamos decir que existen en nuestro entorno microsexismos, esas actitudes de seres queridos que por razones culturales o costumbres tienen una visión androcéntrica del mundo y no han reflexionado respecto a la igualdad entre hombres y mujeres.
Los últimos años hemos avanzado respecto a combatir el sexismo en diferentes entornos, pero todavía muchas mujeres lo sufren. Luchando unidas podremos erradicarlo totalmente de la sociedad.
Fotos: por olia danilevich de Pexels
